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Una de las situaciones que fomenta el abuso -y que suele ser queja de muchos padres de familia- es la propia participación de los profesores en insultos, burlas, sarcasmos, etc.
Parece simple e irrelevante; pero el hecho es, que cuando una autoridad le falta el respeto a un alumno, los demás se sienten con el permiso para imitarlo.
Tal es el caso de un chico, que durante los dos primeros años de primaria se llevaba bastante bien con sus compañeros de clase; pero al llegar a tercero cambiaron al profesorado en la escuela y la situación también cambió. Precisamente ese año, el niño afectado se rompió el brazo; a partir de entonces el maestro de inglés comenzó a hacer comentarios sarcásticos respecto a su condición.
Al comenzar las burlas del profesor, los demás niños iniciaron también. Por ejemplo, durante un ejercicio de inglés en que tenían que pasarse la pelota, el maestro le negó la entrada al niño del brazo roto al que le dijo: "Si no puedes agarrar la pelota con dos manos, menos con una"... Todos los niños festejaron la burla.
Otro día, el profesor sacó al niño del salón porque no dejaba de temblar. El chico tenía frío, por eso temblaba; pero el maestro decidió sacarlo al pasillo, que está al aire libre.
A los pocos días los alumnos tuvieron que hacer un espectáculo de títeres para la misma clase de inglés. El niño hizo varios muñecos de papel para presentar su obra. Al finalizar la clase una niña se los quitó. Aunque el chico le exigió muchas veces que le devolviera las marionetas, la chica le dijo que no porque ahora eran suyos. El chico se quejó ante el profesor, quien lo ignoró por completo.
De manera que el resto del año, el niño tuvo que sufrir las bromas y agresiones de los compañeros que apenas un año antes eran sus amigos. Pues los alumnos contaban con la aprobación de un maestro, que además era querido por todos.
Este tipo de situaciones son delicadas tanto para el alumno como para los padres. Por un lado no se puede permitir este tipo de conducta por parte un profesor; pero por otro, se cae en el riesgo de que el maestro se desquite con el menor si es amonestado por su conducta.
Sin embargo, es responsabilidad tanto de la escuela como de los padres proteger al menor en situaciones de abuso de poder.
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19 de noviembre de 2010, 15:15
En la clase de mí hijo, P3, hay un ninño que lo acosa tanto a él como al resto de la clase y debido a su corta edad los docentes no pueden o no saben como actuar. ¿Qué Puedo hacer?
joanvendrellamaro@hotmail.com